lunes, 24 de octubre de 2022

EN LA ORILLA DEL TAJO: CASTILLO DE ALMOUROL Y CONSTANCIA (PORTUGAL)

https://www.youtube.com/watch?v=ZTLv8liy9Kw

Solo se necesita media hora de viaje en coche para llegar a Tancos, una freguesía de Vila Nova da Barquinha, desde Tomar. Nuestra última visita en Tomar ha sido a la Ermita de la Concepción. Hasta las 11:00 no haremos nuestro recorrido en barco. Mientras tanto esperamos en el Cais de Tancos leyendo bajo los sauces a la orilla del Tajo.

Ribera del río Tajo en Tancos

El día está nublado, la temperatura es muy suave. Estamos solos frente al río que fluye tranquilo, silencioso. Los operarios del Servicio Municipal de Limpieza dan los últimos retoques a este escenario tan placentero.

Antes de la hora en que estamos citados, llega Paulo Lopes cuyo contacto nos han facilitado desde el Posto de Turismo. Descubre la lona que cubre su barco, lo limpia y a las 11:00 nos embarcamos en su pequeño catamarán propulsado por la energía eléctrica de las placas solares que cubren buena parte de su superficie. Junto con otros tres turistas portugueses hemos elegido este recorrido que nos llevará al Castillo de Almourol que, junto con la bellísima Charola del Convento de Cristo en Tomar, descubrí por casualidad en un documental de la 2 sobre los Templarios.

En el Cais de Tancos

No podían imaginar los monjes guerreros que llegaría una época en la que una actividad económica muy poderosa, llamada turismo, convertiría los enclaves en los que desarrollaban su actividad guerrera, religiosa y económica en destinos de peregrinaciones bien distintas de las que ellos protagonizaron en la Alta Edad Media en Jerusalén. Es la belleza arquitectónica de sus construcciones la que nos arrastra viajando de aquí para allá, llevándonos todos las mismas imágenes en nuestras cámaras y Iphones.

Castillo de Almourol en el río Tajo

El viaje nos permite redescubrir la historía de este país que en 1139 iniciaba su independencia del Reino de León y que en arás de construir una identidad nacional se embarcaba en continuas luchas, a veces contra los musulmanes, a veces contra los conquistadores musulmanes, a veces contra el reino de Castilla. Don Alfonso Enriques, primer rey de Portugal, donaba estos territorios a la Orden del Temple como recompensa por el apoyo prestado en la formación del Reino de Portugal y por las victorias militares alcanzadas.

Nos deslizamos suavemente por el río Tajo. Nuestra nave eléctrica es silenciosa. Paulo Lopes con voz entusiasta va narrando aspectos de la historia y de la vida de estos pueblos ribereños. En su discurso portugués distingo insistentemente la palabra fuerza. Luego se dirigirá a nosotros en castellano y nos hablará de la fuerza de aquellos caballeros que desde el castillo de Almourol, erigido en 1171 por Don Gualdim Pais, Gran Maestre del Temple que en Tomar levantó la fortaleza y el Convento de Cristo, defendían el recién nacido reino. El Tajo se convertía en la frontera y aduana entre el Norte y el Sur musulmán y desde el castillo se controlaría el tráfico de mercancías.

Torre del Homenaje sobre el Tajo

Paulo Lopes nos habla de la fuerza del río que, en otros tiempos, cuando su caudal no estaba regulado por los embalses, experimentaba grandes crecidas que convertían los terrenos sobre los que se asienta el castillo en una isla. Los sucesivos veranos de sequías nos impiden rodearlo con el barco. El material sedimentado casi lo une a la orilla hoy día.

Nos habla de la fuerza de los hombres que vivieron en estas riberas e hicieron del río Tajo su forma de vida dedicándose a la pesca, la construcción y reparación de barcos, los viajes y el comercio de mercancias. En la vecina Constancia el Museo de los Ríos y de las Artes Marítimas atestigua esta forma de vida que los cambios en la profundidad del cuace del río y en los medios de transporte y comunicación hicieron desaparecer, determinando que tantas gentes de estas tierras emigraran a Lisboa y a otros rincones de Europa.

En las orillas del Tajo. Constancia

El sosiego del paseo por el Tajo nos acompañará en nuestro paseo por Constancia, tan bellamente situada en la desembocadura del río Zêzere en el Tajo.

Constancia, en la confluencia del río Zêzere y el Tajo

Fue la reina María II quien en 1836, tras alojarse en la localidad durante una visita a Ribatejo,  dio esta denominación, Constancia, a la antigua Punhete por su apoyo a la causa liberal frente a la absolutista. 

Si según dice Saramago en su Viaje a Portugal el turista es el que va buscando aquello de lo que ya tiene un conocimiento previo y el viajero es el que encuentra y descubre, yo, que soy turista, me siento viajera por la historia al descubrir las sorprendentes vidas de tantas reinas en este viaje a Portugal. Desconocía la historia de María II y, mientras descanso en el parque que recorre la confluencia de los ríos Zêzere y Tajo, me informo en la Wikipedia acerca de esta mujer que, como tantas mujeres en las monarquías europeas, sirvieron desde niñas y a través de las políticas matrimoniales y de su capacidad para ser madres, a los intereses políticos de sus padres. A veces, como lo fue en su caso, pudieron participar activamente en la política del estado. A veces, eran devueltas a sus familias si su capacidad de gestar no era la esperada. Dejo un enlace a su biografía por considerar que se trata de un periodo poco conocido de nuestro país vecino: www.mcnbiografias.com/app-bio/do/show?key=maria-ii-reina-de-portugal

Tras recorrer Constancia nos dirigimos hacia Óbidos la Villa de las Reinas esperando llegar al atardecer y disfrutar de su luz recorriendo su muralla.

MÁS INFORMACIÓN:

CASTILLO DE ALMOUROL-VILA NOVA DA BARQUINHA:  http://www.cm-vnbarquinha.pt/

CONSTANCIA: http://www.cm-constancia.pt/ 


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